Con extrema frialdad, Cristina saludó a Julio Cobos y entró el Congreso

Inaugurará el año legislativo con un discurso a las 11. Se esperan anuncios económicos. En el recinto se sentirán las deserciones en los bloques de senadores y diputados del FpV. La Capital y diez provincias también abren el período 2009.

Otros tiempos. Cristina y Cobos en la anterior Asamblea Legislativa cuando la resolución 125 todavía no los había enfrentado.

Luego de siete meses sin mirarse a la cara y de casi un año sin hablar, la presidenta Cristina Kirchner y el vicepresidente Julio Cobos se encontraron hoy en el Congreso para la apertura de las sesiones ordinarias del Poder Legislativo. 

El paisaje que tendrá ante sus ojos Cristina será muy distinto al de hace justo un año: esta vez, los bloques de senadores y diputados del oficialismo estarán con menos miembros, raleados en las últimas semanas por los coletazos de la guerra gaucha, de cuyo inicio se cumplirán doce meses en diez días. 

En el Senado, tras el alejamiento de los santafesinos Carlos Reutemann y Roxana Latorre y los salteños Juan Carlos Romero y Sonia Escudero, el oficialismo tiene los ojos clavados en el misionero Luis Viana y en el empresario cordobés Roberto Urquía, cuyas ausencias dejarían a la bancada kirchnerista al borde mismo del quórum de 37 legisladores, con riesgo de no poder contar con mayoría propia para sesionar.

Las causas de sus eventuales renuncias difieren entre sí. Viana advierte que se irá del oficialismo si desde la cúpula nacional del PJ, que encabeza Néstor Kirchner, no se dispone la normalización del distrito. Los dirigentes peronistas misioneros quieren reconstituir el partido que quedó virtualmente vaciado hace unos años cuando se formó el Frente para la Concordia, una alianza con la UCR que llevó a la gobernación al actual mandatario de origen radical, Maurice Closs. En el debate sobre las retenciones móviles –que fue detenido por el voto “no positivo” de Cobos– Viana apoyó el proyecto oficial. La suerte del misionero, un voto que el oficialismo necesita para asegurar el quórum, depende así de una decisión del presidente del partido. Desde la bancada que encabeza Miguel Pichetto dicen que la llave no está en sus manos. Desde el entorno del misionero dijeron a Crítica de la Argentina que creen que detrás del ninguneo a “Lucho” está la mano del diputado ultraká Juan Manuel Irrazábal, que le prometió a su jefe Kirchner el pase al oficialismo de Ramón Puerta, a cambio de devolverle poder sobre el PJ provincial.